Técnicas de Sembrado y Desección

Técnicas de Sembrado:

¿Qué son?:
Existen dos categorías de siembra: La directa y la indirecta.
La siembra indirecta. Esta se trabaja a partir de almácigos (áreas reducidas y acondicionadas), para posteriormente realizar el transplante a la tierra. Este tipo de sembrado se utiliza cuando las condiciones de la tierra no son del todo favorables, o para garantizar un mejor cuidado a la semilla, ya que al ser en un espacio más reducido y delimitado se podrá tener un mayor control del proceso.

Por otro lado encontramos la siembra directa es aquella en que la semilla se sitúa directamente en el suelo, el cual debe tener las condiciones adecuadas que aseguren el éxito de la siembra (humedad, temperatura, tipo de tierra). En este proceso también e debe considerar la profundidad de la tierra y la distancia que se debe mantener entre una plantación y otra.

Dentro de esta ultima categoría, existen diversas estrategias sobre cómo posicionar la semilla en la tierra. Es así como encontramos:
a) Siembra al voleo: Es una técnica de siembra directa y que intenta depositar las semillas lo más uniformemente posible en la tierra. Esta técnica es recomendable para cereales o legumbres. Y puede ser realizada por máquinas o de manera manual.
b) Siembra en surcos: Se siembra directamente en los surcos una cantidad constante se semillas. La posición de la plantación dependerá de lo que se siembre, de esta manera: Se sembrará en el fondo del surco para legumbres y cereales, en el lateral del surco para el maíz, y en la superficie del surco si se trata de verduras y hortalizas.
c) Siembra mateada en surcos: Se trata de una siembra en surcos pero dejando un espacio de entre 30 a 80 centímetros entre cada semilla o grupo de ellas. Esta técnica se utiliza para el maíz y maní.
d) Siembra de precisión: Esta se realiza unidamente mediante una maquina que va distribuyendo paquetes de semillas por el terreno, el cual luego de un tiempo se desintegra permitiendo que las semillas entren en contacto con el suelo.


¿Cómo abordarlas en el ámbito educativo?:

Como hemos visto, existen diversas técnicas de sembrado por lo que para trabajarlas en e mambito educativo se recomienda dar a conocer ambas categorías (directa e indirecta) de manera exponencial, haciendo hincapié en las diferencias que hay entre ellas, y en qué caso se recomiendan utilizar cada una de ellas.
Sin embargo, como sabemos, la ciencia requiere de experimentación: Por lo que se recomienda que sea abordado el tema mediante la realización de un sembrado. Para esto se debe considerar:
- Recursos de la escuela: ¿Poseemos el espacio para realizar un sembrado? O ¿Será más conveniente realizar un almacigo? Con esto se determinará qué categoría de siembra podremos trabajar.
- Qué tipo de siembra realizar: ¿Qué semillas es factible sembrar en la zona de la escuela? Para esto debo considerar elementos climáticos, los cuidados que requiere la semilla seleccionada (que sean aspectos que se puedan cubrir dentro de la escuela)
- Recursos necesarios: Almácigos o lugar disponible para la siembra, tierra adecuada, semillas, agua, luz solar y cualquier otro que sea necesario en caso de que la plantación requiera algún cuidado particular.
- Crear conciencia dentro de los estudiantes: Es importante que nuestros alumnos se comprometan con la misión del sembrado, es decir, que comprendan que esto es un proceso y que requiere de ciertos cuidados para garantizar el éxito de la siembra.

Al momento de realizar la siembra con el curso, es necesario que se consideren diversos aspectos didácticos dentro de la actividad como:
a) Fijar objetivos: Que los estudiantes sepan que aprendizaje se pretende alcanzar, de manera de poseer un foco dentro de sus acciones
b) Negociar qué semillas y con qué técnica se trabajará: Para ello hay que recurrir a los conocimientos de los alumnos, quienes deberán establecer e identificar que semillas es factible sembrar en su escuela de acuerdo a las necesidades de siembra, condiciones de tierra y climáticas y necesidades o intereses de la comunidad escolar.
c) Establecer estrategias de acción: Asignar a cada alumno diferentes tareas que deberán ir desarrollando a lo largo del proceso. De esta manera unos serán encargados de registrar avances dentro del proceso, otros del nivel de humedad de la tierra (si es el adecuado o no), otros del riego…etc. De esta manera se logra realizar un trabajo colaborativo dentro de todo el curso, que además permite a los alumnos sentir la responsabilidad y sentido de pertenencia de lo que se está realizando.
d) Desarrollar la siembra: Para esto el docente se debe mostrar como agente mediador y ser en encargado de ir monitoreando el proceso. Recordemos que lo esencial es el aprendizaje de los estudiantes, por lo que el docente no es quien realiza la actividad ni da pautas concretas de cómo actuar, si no que debe velar por el que los propios estudiantes sean capaces de reflexionar y tomar decisiones acerca de sus acciones apelando a sus conocimientos.



Técnicas de disección.

¿Qué son?:
La disección son cortes que se realizan a plantas, animales o seres humanos muertos, con el objetivo de estudiar alguno de sus componentes u oréanos que de por sí no son visibles.
Las técnicas de disección deben considerar que estas poseen un objetivo, ya sea para realizar un estudio, una cirugía, tomar una muestra ò realizar una autopsia. Y según estos objetivos y el carácter de la disección a realizar se deberán considerar los tipos de cortes que se deben realizar según el objeto que vaya a ser diseccionado.
Esto último es de suma importancia, pues cada objeto que se utilice para la disección requiere un tratamiento distinto, lo que obliga a poseer ciertos conocimientos estructurales de este. Así, no será lo mismo trabajar con una rana que con el ojo de algún animal.

¿Cómo abordarlas en el ámbito educativo?

Para trabajar el tema de la disección será recomendable comenzar por aclarar el qué son y el porqué se realiza este tipo de prácticas dentro de nuestra sociedad, ya que con esto se logrará que los estudiantes conozcan la importancia de este tipo de ejercicios para el desarrollo de las investigaciones y de la ciencia.

Luego de aclarar esto, será posible trabajar a partir de algunos ejemplos, de manera de materializar lo que se ha expuesto. De esta manera se puede abordar un tipo de disección en particular, que permita evidenciar qué es necesario saber del cuerpo antes de trabajar, cómo se realizan los cortes según las zonas…etc.

Luego de ello, y si se encuentra en un curso apropiado para la experimentación sería recomendable realizar algún tipo de disección o simulacro de ella mediante alguna página Web o video que brinde este servicio.
En el caso de que optemos por realizar la disección debemos considerar:
- Qué diseccionaremos
- Que conocimientos deben poseer los alumnos de la anatomía del objeto de estudio.
- Recursos necesarios: Un laboratorio equipado con bisturí, pinzas, tijeras, guantes y otros que se consideren necesarios.

Al momento de trabajar, será necesario tener algunas consideraciones:
a) Establecer un objetivo de trabajo, de esta manera los estudiantes sabrán qué conocimientos y aprendizajes se pretenden lograr con la actividad a realizar.
b) Planificar con anterioridad la actividad, de manera de que los recursos necesarios para esta, estén disponibles el día de la disección.
c) Recordar a los estudiantes el grado de importancia que posee esta actividad, por lo que su comportamiento debe ser el adecuado. No se debe manipular el material de forma inadecuada ni jugar con estos, ya que podrían provocar un accidente.
d) El docente debe monitorear en todo momento el trabajo de los estudiantes con el objetivo de ser un apoyo para estos y para resguardar su seguridad. Para este último punto, si es posible, se recomienda la presencia de algún otro adulto dentro de la sala de clases, con el fin de fiscalizar el manejo de los recursos por parte de los estudiantes y evitar accidentes.